Un talismán de un kobold mayor se vendía por un buen precio. Ya fuera una arracada, un adorno de nariz, o en ocasiones un collar, cualquiera estaba garantizado para venderse por más de 5 platas a causa de las piedras preciosas incrustadas en ellos. Había incluso casos en donde una sola piedra se vendía por más de 40 platas.

Mientras que en el segundo estrato estaban las viviendas de los kobolds trabajadores de bajo rango, el tercer estrato hospedaba a los kobolds trabajadores de alto rango. Los capataces mayores de estos trabajadores eran llamados ‘Foremen’. Los foremen eran similares en el físico a los kobolds trabajadores que ellos encontraban en el segundo o tercer estrato, pero, a diferencia de los trabajadores, ellos estaban propiamente vestidos con equipo de combate.

Estos foremen y sus kobolds subordinados eran el objetivo principal del grupo de Haruhiro. La dificultad de la pelea dependía enteramente de la competencia del foreman. Esto no era solo la habilidad marcial del foreman, sino también su habilidad para comandar a sus subordinados. Contrario a la intuición, las peleas en las que el foremen prefería estar al frente y pelear todo por sí mismo eran completamente fáciles de ganar. En el otro lado, cuando ellos se encontraban a un foremen quien se quedaba atrás para dar órdenes, hacían la batalla difícil.

Los humanos eran lo mismo. En general, los humanos tendían a enfocarse enteramente en el enemigo ante ellos primero, y no era difícil de entender porque. Ir detrás de un enemigo mientras se ignora al que está enfrente de ti era una forma segura de hacer que te mataran. Nadie era así de tonto, por su puesto, por lo que hablando pragmatically, la primera prioridad en una pelea era eliminar a la amenaza inmediata.

Pero, algunas veces las prioridades cambiaban. Por ejemplo, cuando un compañero está en problemas, tú podrías arriesgarte a dejar una apertura para un ataque en orden de ayudarlo.

Entonces había veces cuando era una orden, no una opción.

Haruhiro nunca podría forzar a que alguien se pusiera en tal riesgo, pero los kobolds foremen eran diferente. Ellos podrían aullar y señalar a sus subordinados ignorar a Mogzo y Ranta y atacar a Mary o Shihoru en cambio. Y ya fuera por valentía, sumisión, o timidez ante el macho alfa, los subordinados obedecerían sin pensar en la perceveración de sus propias vidas.

Si ellos fueran actualmente capaces de pasar a Mogzo y Ranta, esto podría poner al equipo en un gran problema. La clase mago de Shihoru en particular no tenía habilidades de combate cercano y necesitaba que todos la protegieran. Su formación de batalla colapsaría y la pelea podría volverse un desastre.

Por el otro lado, si ellos podían derrotar al foreman en la pelea, los subordinados duramente poseían una amenaza. De la forma en la que Haruhiro lo veía, todo lo que ellos tenían que hacer era llegar con una estrategia para tomar al foreman lo más rápido posible para dejar al resto de los kobold indefensos.

Actualmente, había siempre un foreman y dos o tres subordinados en cada pelea. Con esta predecible composición del grupo enemigo, ellos tenían una ventaja, y ellos también se habían vuelto habilidosos cazándolos. A este paso, descender al cuarto o quinto estrato no parecía una mala idea, y cuando la siguiente escalera paso dentro de su línea de vista tan naturalmente, la motivación de todos se incrementó.

Ellos habían estado trabajando en el tercer estrato por diez días y habían guardado un poco de dinero por lo que ellos decidieron que podrían regresar a sus gremios para adquirir nuevas técnicas. Todos estaban emocionados de incrementar sus habilidades de combate y ser capaces de hacer más en las peleas les podría dar una sensación de logro.

Haruhiro regreso con la Maestra Barbara y el Gremio de ladrones y pago 4 platas para aprender la técnica de ladrones, [Widow Maker].

“¿Deberíamos empezar entonces, Old Cat?” Maestra Barbara sonrió.

El área de entrenamiento era un cuarto en el recinto del Gremio de ladrones en Nishimachi llamado “Cuarto del veneno asesino”. Era un cuarto de presentimiento espantoso, pero la mayoría de los cuartos en las cercanías tenían nombres similares. El cuarto del veneno asesino por si solo era un poco espacioso, pero no contenía una sola ventana. Un candelabro lleno con velas que podría ser levantado y colgado desde el tejado y proveía algo de luz, pero incluso una persona generosa no podría llamar el cuarto como bien iluminado.

Si no fuera por las velas, el cuarto podría estar totalmente oscuro incluso durante el día. La completa atmosfera hacía sentir a Haruhiro un poco incómodo.

Maestra Barbara estaba en su usual ropa reveladora, excepto que hoy, la parte baja de su cara estaba cubierta con un velo negro. Su largo cabello ocultaba incluso más su cara, incluyendo un ojo, haciendo su apariencia un poco aterradora.

“Er… si, ma’am,” respondió Haruhiro cortésmente.

“tú te has fortalecido, ¿o no? ¿O has estado trabajando para fortalecerte aquí?”

“No, ma’am. Yo no he estado particularmente tratando de—.”

Haruhiro no pudo terminar su oración, porque la Maestra Barbara se había repentinamente movido detrás de él. Antes de que él pudiera siquiera empezar a voltearse, la Maestra Barbara lo tenía en una llave de Nelson completa… o algo así. Ella tenía ambos brazos bloqueados firmemente, pero también tenía su pierna derecha enredada alrededor de una de sus piernas, dejándolo completamente inmóvil. Y su cuchillo estaba contra su yugular.

“[Widow Maker] es una técnica donde tu instantáneamente agarrar a tu objetivo por detrás, algo como esto, y entonces lo hieres mortalmente. Si yo lo deseara, tu garganta ya estaría cortada. Si tú no tienes un cuchillo, puedes simplemente solo romper su cuello. Y cuando tú quieres incapacitarlo, en lugar de matarlo…” la Maestra Barbara movió la punta de su cuchillo de su garganta bajando hasta su entre pierna. “Tú debes apuñalarlos aquí. Es particularmente efectivo en los hombres.”

“Uhh… correcto,” dijo Haruhiro. “Si, ma’am. Er… podría ser posible… que me dejara ir ahora? Porque, tu sabes…”

“¿Hmm? Oh, si… Tu nunca has intimidado con una mujer ante, ¿o lo has hecho? ¿No estás acostumbrado a estar así?” La maestra Barbara se rio entre dientes ligeramente.

“Err…” Haruhiro trato de inclinarse lejos, pero la Maestra Barbara lo sostuvo abajo firmemente. “¡Wah! ¡¿P-podrías por favor dejar mi oreja?!”

“¿Qué tiene de malo? Yo solo estoy respirando normalmente,” ella respondió.

“E-es solo… que, er, mi punto débil…”

“Ya veo. En ese caso…”

“¿Huh?” Haruhiro no tenía idea de que había pasado después. Él esta repentinamente sobrevolando a través del aire antes de impactar fuerte sobre su espalda, sacando el aire de sus pulmones. La Maestra Barbara lo miró hacia abajo desde arriba.

“Si tú puedes combinar [Widow Maker] con otras técnicas, hay un montón de formas en las que tú puedes manipular a tus enemigos,” ella continuó, “Pero primero, te tendré íntimamente familiarizado con los efectos de la técnica en ti mismo… y nosotros nos mantendremos hasta que tu vomites sangre.”

“…Um, y ¿no moriré? Ma’am.”

“No hay que preocuparse sobre ello, ¿lo hay? Tu ni siquiera te darás cuenta de que estas muerto. Pero estate tranquilo, Yo seguro hare que te cremen, y entonces la maldición del Deathless King no te zombificara.”

¿Qué iba a hacer él si moría? Ninguno de los otros lo sabía, pero incluso desde la primera vez que él se encontró con la Maestra Barbara había sido de esta forma. Aunque, dándole crédito, ella siempre se detenía cerca de casi matarlo y Haruhiro se había vuelto bastante competente usando las técnicas de pelea que ella le había enseñado. Tal vez. Quizás. ¿Siquiera estaba realmente bien? ¿Realmente?

Por las siguientes tres horas, Barbara sensei usó [Widow Maker] en todas sus variaciones en Haruhiro, hasta que él colapso y no podía ponerse de pie de vuelta.

“¿Cuál es el problema? Ahora no es el momento para estar de flojo, Old Cat.”

“Lo siento, Ma’am.”

“Si no puedes párate, entonces supongo que tomaremos un descanso,” dijo Barbara sensei (n/t: se me hace más fácil así) e inmediatamente se sentó a sí misma en el estómago de Haruhiro. Haruhiro hizo un sonido medio asfixiado, medio gargareando. “Sopórtalo. Tu entrenamiento no se detiene cuando estas descansado. Endurece estos músculos en los abdominales. Y tal vez nosotros podamos incluso hacer algo por estos músculos creciendo, ¿hmm?”

“Moriré, seguro moriré…”

“Pero esto es tolerable, ¿o no lo es? No muchas personas han muerto por mi entrenamiento, vez.”

“¿Actualmente han muerto personas?”

“Estoy bromeando. ¿Porque querría matar una hermosa fuente de dinero entrante? Ahora, sube de nivel.”

“Urghhhh…” Haruhiro gruño mientras ella levantaba una pierna, incrementado el peso en él. Él ya estaba poniendo algo de fuerza en mantener los músculos de su estómago duros. Si él no lo hacía, no habría forma de borne el peso.

“Y se incrementa esto,” dijo ella mientras levantaba su pierna restante.

El peso entero de su cuerpo ahora estaba sobre el estómago de Haruhiro. ¿Se suponía que esto era un descanso? Si esta era su idea de una broma, no era graciosa.

“Platiquemos por un rato,” Barbara sensei propuso agradablemente.

“N-no p-puedo,” Haruhiro jadeo.

“Chico estúpido. No respondas.”

Ella estaba demandando lo imposible. Como es usual. Y si Haruhiro no la obedecía, las consecuencias podrían ser incluso peores.

“¿U-uhh… hablar… sobre que, ma’am?” él cedió.

“Tú puedes platicarme una historia.”

“Yo realmente… n-no tengo alguna, ma’am, Hi-historias.”

“Que aburrido. Vez, esto es el por qué tú nunca serás capaz de acostarte con una chica.”

“Su-supongo… de ese modo.”

“Tú tienes chicas en tu equipo, ¿correcto? ¿Cuántas?”

“T-tres,” Haruhiro jadeo.

“Tú necesitas al menos reclamar una. Por supuesto, pretendiendo las tres podría hacerte un poco el macho alfa.”

“N-no, ma’am… eso es m-mucho…”

“¿Este tipo de drama entre los miembros de un equipo es mucha molestia?” Barbara sensei se aventuró.

“Y-yo… no lo sé, ma’am. Y-yo no tengo… experiencia alguna con eso…”

“Incluso si es un poco molesto, un poco de ello es necesario. Eso me hace recordar cuando yo era como tú eres ahora… Yendo en secreto con el líder del equipo, mientras jugaba con nuestro mago al mismo tiempo, y mientras jugaba alrededor con el líder de otro equipo. Bueno, nuestro equipo se vino abajo poco después de esto y otras cosas pasaron…”

“…B-barbara sensei… cuando tú dices que se ‘vino abajo’… t-tú quieres decir que tú fuiste quien los separo, ¿c-correcto?”

“Ah, la primavera de la juventud. ¿No lo sientes también?”

“Eso… s-suena más como… una pasión alocadamente ciega, ma’am,” dijo Haruhiro.

“No digas cosas como esa,” Barbara sensei lo castigo.

Haruhiro jadeo, incapaz de soportarlo más cuando ella levanto ambas piernas y sacudió su trasero profundamente en su parte media. Pero si él intentaba voltearse alrededor para lanzarla fuera, él no sabía que podría ella hacerle, por lo que él no tenía opción más que permanecer quieto y tomarlo. Aunque él tenía que admitir, que el sentido de balance de Barbara Sensei era impresionante.

“No hay otro tiempo sino el ahora,” ella continuo. “¿Tú tienes qué? ¿16? Y alrededor de tus 16 años de Viejo se encuentran chicos y chicas. Es sumergirse o nadir. Una vez que el tiempo pase, tú no serás capaz de traerlo de vuelta. Nunca. Si tú no haces tú movimiento ahora, la chica que te gusta será robada por alguien más. Básicamente, otros chicos van a querer hacerle a la chica lo que tú quieres hacerle también, y entonces ella se habrá ido. Y cuando tú te des cuenta de esto porque los viste haciéndolo en público, será muy tarde.”

“P-pero, ma’am… no hay una chica que me guste,” respondió Haruhiro.

“¿En serio? ¿Estás seguro?”

“¿Huh?”

“Old cat. Tú pareces tener la tendencia de siempre jugar a la segura. Tu solo te estas reteniendo porque no quieres causar fricción entre tus miembros de equipo, ¿No lo estás?”

“E-esto es… uhh…”

“En mi experiencia, los chicos caen enamorados de las chicas que son cercanas. Los chicos están construidos de esta forma por naturaleza – para caer enamorados con las chicas alrededor de ellos.”

Las chicas alrededor de él. Yume, Shihoru y Mary. Él no odiaba a ninguna de ellas. Él algunas veces pensaba que la cabeza hueca de Yume la hacía parecer muy linda, y ellos se habían abrazado el uno al otro. Esto había sido bajo alguna bastante única circunstancia, seguro, pero la forma en la que esto se sentía aun perduro. O más bien, él no lo había olvidado. Pero si preguntaban si él tenía “sentimientos” por ella, él no pensaba que los tuviera. Probablemente.

Shihoru… Bueno, sus pechos son realmente grandes. Qué. ¿Porque esta es la primer cosa que se me viene a la mente sobre ella? ¿Era él alguna clase de bárbaro? ¿Un hombre primitivo? Él era el peor. El peor absolutamente. Y también allí esta esto

Shihoru había querido a Manato. O eso parecía. No, olvida el “parecía”. No había realmente dudas sobre ello. No había forma de que él pudiera… no, solo no. Fuera de cuestión.

Mary, ¿Entonces? Mary era… Elegante y hermosa. Haruhiro, una completamente ordinaria persona, no tenía una oportunidad en el infierno de acercarse a alguien como ella. Ella era su compañera de equipo, por lo que tenía que haber cierto grado de cercanía, pero Haruhiro realmente no pensaba que había algo más entre ellos.

No hace mucho tiempo, durante una conversación sobre sus tipos, Mary había dicho que su tipo era Mogzo. ¿Esto significaba que ella no estaba solo superficialmente en hombres de buen ver? Pero si era Mogzo, entonces Haruhiro tenía cero oportunidades, ¿No lo tenía? Ninguna bola de nieve en el infierno. Pero no era como que él tenía estos sentimientos por Mary de todas formas. Probablemente.

Él solo… deseaba que él pudiera hacerla sonreír más.

Esto lo tocaría profundamente si él pudiera ver a algo tan amoroso como su sonrisa verdadera. Esto sería más que maravilloso. Pero él no estaba interesado en ella en una forma romántica, él no lo pensaba.

GL2C7

“Err… ¿Barbara sensei?”

“¿Si, Old Cat?”

“¿Puedo preguntarte algo?”

“Por supuesto es sobre chicas, ¿verdad?”

“No realmente…”

“Chico patético. ¿Tratando de cambiar el tema ahora, en el que estamos?”

“No ma’am. Yo no podría atreverme. Yo no podría incluso pensar sobre ello. Esto no es. En serio.”

Haruhiro le platico sobre la line que aparecía de vez en cuando durante las peleas. La parte baja de la cara de Barbara sensei estaba oculta por un pañuelo por lo que su expresión era difícil de leer, pero Haruhiro tenía el presentimiento de que ella estaba escuchando con atención. Ella además puso sus pies de vuelta al piso mientras él hablaba, tomando su peso fuera de él.

“Ya veo,” dijo ella extendiéndolo. “Este no es un mal presagio.”

“¿Presagio?”

“Pero no te equivoques. No es algo especial.”

“¿Equivocar? Yo no conozco incluso algo sobre ello”

“Lento, no lo eres? Un gato viejo en todos los sentidos.”

“¿Lento? Yo no creo que sea lento, ma’am…”

“No, tu eres lento. Pero. Para alguien tan denso (dull-witted), tus instintos no son malos. La línea que tú ves – sientes, quizás sea una mejor forma de describirlo—aparece de vez en cuando a cualquiera que acumule suficiente experiencia.”

“Pero no es solo una o dos veces, ma’am. Yo no puedo decir que la veo todo el tiempo, ni siquiera una vez al día, pero…”

“Si, ese debe ser el caso. La diferencia es bastante amplia dependiendo de la persona.”

“¿Qué hay sobre ti Barbara sensei?”

Ella se encogió de hombros. “Algunas veces aparece, algunas veces no. No es como que nosotros podemos ordenarle que aparezca al concentrarnos fuerte ni nada.”

“Pero cuando tú la vez, ¿eres capaz de ejecutar [Backstab] perfectamente también?”

“Aunque no es algo en lo que puedas confiar, ¿no?”

“…Por supuesto. Es muy errático. Casi como su fuera completamente aleatorio.”

“Exactamente. Trabaja en perfeccionar tus técnicas de pelea. Y ejercita estos músculos.”

Haruhiro jadeo una vez más mientras Barbara sensei levantaba sus piernas de nuevo. Él no podía ver su expresión, pero ella estaba probablemente sonriendo como una loca mujer bajo ese pañuelo.

“Tu aun tienes formas de avanzar. Tu tiene que fortalecer tu fuerza y resistencia para ir tras una o dos con una chica después de matar cinco, seis orcos. Porque tú en realidad no eres un gato viejo.”

“Y-yo estoy bien con ser un gato viejo, ma’am…”

“¡No seas descarado, mocoso!”

“ARGH…”

Barbara sensei lo había golpeado en la ingle, casi haciendo que se desmaye.

“Whoops. Pon un poco más de atracción sexual en esto justo ahora…”

Si él seguía entrenando aquí, Haruhiro tenía el sentimiento de que tarde o temprano, él quedaría estéril.

 

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